- 6 albóndigas por ración.
3 recetas de albóndigas
Ingredientes
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Para las albóndigas de champiñones y gambas:
- 1 cebolla dulce
- 250 g champiñones
- 350 g gambas
- perejil
- sal
- pimienta
- 80 g pan rallado
- 80 g harina de trigo
- 1 huevo
- 200 ml aceite de oliva suave
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Para las albóndigas de tofu:
- 1 cebolleta
- 130 g calabacines
- 300 g tofu
- sal
- pimienta
- 80 g pan rallado
- 80 g harina de trigo
- 200 ml aceite de oliva suave
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Para las albóndigas de espinacas y bacalao:
- 1 diente ajo
- 80 g puerros
- 100 g espinaca baby
- 300 g bacalao desmigado
- sal
- pimienta
- 80 g pan rallado
- 80 g harina de trigo
- 1 huevo
- 200 ml aceite de oliva suave
Preparación
En un bol, mezclamos la cantidad total de sal, pimienta negra, pan rallado y harina de trigo de las tres recetas de albóndigas. Reservamos la mezcla de secos para las siguientes elaboraciones.
Para las albóndigas de champiñones y gambas: rehogamos la cebolla, los champiñones, las gambas y el perejil picados finamente en una sartén con aceite de oliva y reservamos en un bol para que el conjunto se enfríe. Añadimos la mezcla de secos y el huevo, y mezclamos hasta que los ingredientes se integren. Formamos las albóndigas, las pasamos por harina y freímos en una sartén con aceite de oliva, dorando todos los lados. Reservamos en un plato con papel absorbente, emplatamos y… ¡a disfrutar!
Para las albóndigas de tofu: rehogamos la cebolleta y el calabacín picados finamente y el tofu ligeramente triturado en una sartén con aceite de oliva y reservamos en un bol para que la mezcla se enfríe. Añadimos la mezcla de secos y mezclamos hasta que los ingredientes se integren. Formamos las albóndigas, las pasamos por harina y freímos en una sartén con aceite de oliva, dorando todos los lados. Reservamos en un plato con papel absorbente, emplatamos y… ¡a disfrutar!
Para las albóndigas de espinacas y bacalao: rehogamos el ajo y el puerro picados finamente, las espinacas y el bacalao desmigado en una sartén con aceite de oliva reservamos en un bol para que la mezcla se enfríe. Añadimos la mezcla de secos y el huevo, y mezclamos hasta que los ingredientes se integren. Formamos las albóndigas, las pasamos por harina y freímos en una sartén con aceite de oliva, dorando todos los lados. Reservamos en un plato con papel absorbente, emplatamos y… ¡a disfrutar!
Las albóndigas, son una elaboración muy útil para poder aprovechar ingredientes de otros platos. El ejemplo más clásico es elaborarlas a partir de la carne del cocido.
Es un tipo de receta que nos da pie a incluir diferentes opciones de relleno, pudiendo hacerlas con pescados, mariscos, carnes o también opciones vegetarianas añadiendo legumbres, soja texturizada o tofu. También nos permite introducir alimentos poco utilizados en casa, como las espinacas u otras verduras, ayudando a familiarizarnos con esos sabores.
En estas tres recetas, tenemos opciones de proteína de buena calidad, como las gambas, el bacalao o el tofu, junto con el huevo. También tenemos una fuente de hidratos en el pan rallado y harina de trigo, así como grasas con el aceite de oliva suave y las del propio huevo.
No debemos olvidar que al ser un producto rebozado y que se suele freír, no es ideal para consumirlo de manera habitual, aunque sí se hacen al horno, puede mejorar la receta.
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