387 kcal por ración
INFORMACIÓN ADICIONAL SOBRE NUTRICIÓN:
Una de las mejores formas de aprovechar los alimentos en la gastronomía es hacer recetas que aglutinen varios ingredientes y se cocinen de una manera sencilla. Dentro de estas opciones, podemos destacar el tumbet como una de las más tradicionales. Podríamos incluir aquellas verduras u hortalizas que nos sobren, aunque no lo llamemos igual.
Tenemos una receta completa, en la que incluimos una buena ración de verduras. La patata nos aporta energía e hidratos de carbono, por lo que será un plato denso a nivel nutricional. Para incluir la proteína, tenemos la sobrasada. Sabemos que los embutidos y las carnes procesadas no son para un consumo muy frecuente, por lo que podríamos usar otras alternativas como el huevo a la plancha o revuelto. También podemos usar humus o soja texturizada, teniendo así una alternativa vegana.
Al ser un plato basado principalmente en materias primas, sólo tendríamos que revisar los productos envasados para revisar que no contengan trazas de gluten para tener una receta apta para personas con celiaquía.
En lugar de freír las patatas y las hortalizas, podemos hornearlas para tener una receta más saludable y de paso, aprovechar el horno para cocinar otros platos o una ración mayor para otro día.
Información nutricional sobre el ingrediente destacado:
El tumbet es un plato típico de Mallorca muy similar a la Samfaina, aunque su popularidad se ha extendido también a la provincia de Castellón. Su origen nace de utilizar el excedente de hortalizas de temporada: berenjenas, patatas, pimientos y tomates.
En esta receta, junto con la mezcla de hortalizas, destaca la patata. Este tubérculo, nos aporta principalmente energía e hidratos de carbono. Su versatilidad en la cocina nos permite utilizarlas en infinidad de platos, como purés, cremas, bizcochos o pasteles, así como horneadas o en guisos. Es un alimento ideal para cocinar cuando se tiene poco tiempo, ya que se puede cocinar en unos cinco o diez minutos en el microondas.
Podemos destacar que si una vez hervidas o guisadas, las dejamos enfriar, obtenemos un almidón resistente, que ayuda a nuestra microbiota y nos sirve como prebiótico. Una vez las hemos enfriado, cuando las queramos comer únicamente tenemos que calentarlas.
Aunque no es el ingrediente mayoritario, en esta receta también destacamos la sobrasada mallorquina. Ya que es uno de los alimentos más conocidos de esta tierra, hasta el punto de estar protegido con el sello de indicación geográfica. Este embutido destaca por estar elaborado con carne de cerdo y condimentado con sal, pimentón y pimienta negra. Como sabemos, los embutidos o carnes procesadas no son una opción para consumir de manera frecuente, pero puede ser un recurso para consumir de manera puntual. Destacar que también podemos encontrar alternativas veganas.
Selecciona los ingredientes que deseas incluir en la lista de la compra:
387 kcal por ración
89,79 g
28,25 g
6,08 g